El buen samaritano

Lucas 10:25-37(RVR60)
Sin duda la enseñanza que a simple vista nos deja la parábola del buen samaritano es nuestro amor, respeto y cuidado por la vida del prójimo, por eso, debemos aprender a ser solidarios digo aprender, porque muchas veces se manifiesta interiormente en nosotros esa lucha egoísta de que si a mí no me pasó nada todo lo demás no importa.
Pero qué otras cosas más nos revela?
Como sabemos, la Palabra de Dios siempre tiene una dimensión espiritual en todo lo que manifiesta. Muchas veces Jesús expreso estas verdades espirituales en forma de parábola (Es en esencia, un relato simbólico o una comparación basada en una observación de un hecho que puede ser real del que deriva una enseñanza)
La gran pregunta aquí es como podremos heredar la vida eterna:
En primer lugar Jesús le refiriere las escrituras: Lo primero que aprendemos es que en la Palabra de Dios está revelada de manera clara como podremos alcanzar esta bendición. Es fundamental que conozcas lo que está ahí escrito, para que tu camino vaya en la dirección correcta (Lámpara es a mis pies tu Palabra y lumbrera a mi camino. Salmos 119:105)
Hasta aquí, podemos decir como ese conocedor, interprete de la ley “yo ya sé; conozco tu Palabra” v. 27
Pero faltaba algo más, y por eso esta parábola.
Cómo demuestro mi amor por Dios con todo mi corazón, con toda mi alma y con todas mis fuerzas y con toda mi mente?
Esta es una pregunta que puede llegar a confundirnos mucho, porque algunos han pensado que solamente con buenas obras alcanzaremos esta promesa de Dios y tratan de ayudar cuando le es posible pensando que eso solo será suficiente. En la carta a los Efesios 2:9 Pablo, inspirado por el E.S. trae más luz sobre el tema y dice “no por obras, para que nadie se gloríe”. A veces, cuando estamos en capacidad de ayudar a otros nos sentimos en un estado de satisfacción interior, que no es malo, pero tenemos que tener cuidado de no confundirnos.
Quiero llevarte a la figura que esto representa
Ese camino representa nuestra vida y nuestro transitar por ella
Los ladrones representan a Satanás, el diablo, con sus demonios, tentaciones y mentiras que nos asechan y asaltan constantemente dañando nuestra vida, Amenaza nuestra mente, nuestra salud, nuestra economía, nuestras relaciones, nuestra psiquis
El hombre representa a las personas caminan en esta vida sin conocer la verdad del Evangelio van distraídos, sin protección por no estar en Cristo y son golpeados una y otra vez estando en medio de su vida desahuciados, como que no tienen más esperanza. No conocen más que los ataques del enemigo, y para muchos es tan así, que aceptan vivir borrachos, drogados, en peleas, amargados…es la vida que conocen y piensan que es lo único (están casi muertos)
El sacerdote representa la estructura religiosa. No hace nada, NO PUEDE HACER NADA.
El Levita representa las promesas y actividades que realizamos para agradar a Dios. NO ALCANZA, tampoco puede hacer nada.
El tema en todo esto es que hagamos la voluntad de Dios, y cuál es la voluntad de Dios?  Mateo 18:13 (no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.)
Esto esta hablándonos claramente que tenemos que hablarle este mensaje a aquellos que permite Dios pasen, por un breve tiempo cerca nuestro.
Pero no queda ahí porque esto continua, luego de haberlo atendido en el camino, lo lleva al mesón y continua su cuidado hasta que esté completamente sano (y el pueda ahora, de la misma manera que recibió misericordia, rescatar a otros heridos del camino.)
Es importante que prediques el evangelio de salvación, y junto con eso acompañes durante ese tiempo de sanidad y restauración a tu prójimo.
El intérprete de la ley tenía todo lo necesario para rescatar a multitudes que estaban muriéndose en el camino, pero algo lo detenía. Que era? No lo sé, pero Jesús termina diciéndole “rescata a los que están heridos en el camino” (ve tú, y haz lo mismo)
Probablemente este samaritano no sabía qué hacer, pero fue movido a misericordia y aunque la situación era difícil él se decidió a ayudar.
El Espíritu Santo te está moviendo a misericordia en este tiempo. El Señor te envía “ve tú, y haz lo mismo” v37
La impronta de la iglesia en este tiempo debe ser esta: El socorro es uno a uno, y Dios traerá sanidad a miles
Estas dispuesto?… El que te sanó, te llama.